Un día de paseo por los alrededores de Paraná, sin recorrido previo, librado al destino e intuición.
Las cuatro fotos sirven como puntos de referencia que luego ampliaré en entradas siguientes, la superior corresponde a la vía que accede al pequeñísimo pueblo de Tezanos Pinto, ubicado a tan solo 15km de la ciudad capital de Entre Ríos y sorprendentemente aislado, hecho que ha servido para que cargue con historias muy atractivas y muy poco difundidas, sigue con el túnel bajo el destruído puente La Picada, otra historia increíble, continúa con el cruce ferroviario del Arroyo las Conchas y cierra con un atardecer de esos que nos regala la llanura litoraleña.
Mucho para tan poco tiempo, lo que demuestra la generosidad de lugares que existen por estos caminos, para nada difundidos y demuestra también todo lo que uno desgraciadamente nunca conocerá.
Las cuatro fotos sirven como puntos de referencia que luego ampliaré en entradas siguientes, la superior corresponde a la vía que accede al pequeñísimo pueblo de Tezanos Pinto, ubicado a tan solo 15km de la ciudad capital de Entre Ríos y sorprendentemente aislado, hecho que ha servido para que cargue con historias muy atractivas y muy poco difundidas, sigue con el túnel bajo el destruído puente La Picada, otra historia increíble, continúa con el cruce ferroviario del Arroyo las Conchas y cierra con un atardecer de esos que nos regala la llanura litoraleña.
Mucho para tan poco tiempo, lo que demuestra la generosidad de lugares que existen por estos caminos, para nada difundidos y demuestra también todo lo que uno desgraciadamente nunca conocerá.
No hay comentarios:
Publicar un comentario